Fotografía de Alejandro Cegarra, parte de la serie ‘Nuestra guerra invisible’. Haga click en la imagen para ver la fotogalería
En junio de 2016, en Caracas Chronicles se publicó un artículo en inglés donde, producto de una minuciosa investigación, se planteaban serias dudas sobre el reporte emitido por el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) que afirmaba que en 2015 hubo 27.875 muertes violentas en Venezuela. La investigadora Dorothy Kronick, a través de varios argumentos y datos, demostró que probablemente ese informe del OVV exagera la cifra en aproximadamente 6.000 víctimas. El mismo artículo fue publicado en español por Prodavinci y puede leerlo haciendo click acá.
Después de publicado el trabajo de Dorothy Kronick, sucedió algo poco habitual: el OVV estuvo de acuerdo con los puntos esenciales del artículo y escribieron una respuesta. En aquella respuesta, la vocería del OVV admite que malinterpretaron un punto crucial de la información correspondiente a 2013 que ocasionó que, al recalcular los totales de homicidios, obtenían un número aproximado a 24.600, sustancialmente inferior al estimado inicial de 27.875.
Sin embargo, a pesar del debate público y del reconocimiento en cuanto al error de cálculo, existen motivos para pensar que la rectificación no ha sido suficiente.
El OVV aceptó, tanto explícitamente en sus comunicaciones con nosotros como de manera más circunspecta en su respuesta pública, que este debía ser corregido. Sin embargo, recientemente en NTN24 se publicó esto:
“El director de la organización no gubernamental (ONG) Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), Roberto Briceño León, aseguró este martes que ha aumentado la incidencia de los delitos no violentos en la nación caribeña, que registra altas tasas de criminalidad y que se espera que este año se reporten al menos 30 mil muertes violentas.
Aseguró que reportan un incremento general de los delitos en Venezuela y, aunque reconoce la dificultad de hacer proyecciones en materia de criminalidad, estima que 2016 cerrará con aproximadamente 30 mil muertes violentas, frente a las 27.875 reportadas por esa ONG para 2015. Frente a los datos de la ONG, las cifras oficiales cifraron, sin embargo, en 17.778 los muertos en casos de homicidio intencional o doloso en 2015, lo que representa una tasa de 58,1 homicidios por cada 100.000 habitantes”
Roberto Briceño León ha vuelto a usar una cifra que el OVV había asumido como errada hace apenas unas semanas. Y va más allá: el director de la OVV ha proyectado un estimado de muertes violentas para 2016 apenas en agosto. En cierta manera, con esto último el doctor Briceño León deja ver que con la metodología que está utilizando el Observatorio no hay necesidad de esperar a que el año termine para saber cuántas muertes por violencia habrá: sus cifras siguen siendo proyecciones con base en datos errados que no refieren ningún tipo de dato actualizado. La metodología del OVV genera nuevos estimados año tras año a partir de extrapolaciones de data de años anteriores. Visto así, el estimado para 2015 no contenía ni un solo dato fresco de 2015 y hubiesen podido publicarlo el primer día del año. y, con este método, hoy mismo se podría cometer la irresponsabilidad de ir calculando el estimado de asesinatos para 2017. Esta metodología no permite que nada de lo que pase entre este momento y el 31 de diciembre altere su estimado.
Este comportamiento sólo permite intuir que el OVV publica datos inflados a drede y divulga información que sabe que es falsa. De no ser así, ¿por qué el Observatorio Venezolano de Violencia insiste en un dato del cual ya se había retractado? ¿Qué objetivos persigue con esto?