¿Cuál de los equipos tiene más probabilidades de llevarse el Campeonato? ¿Por qué?
Boston. Su ofensiva es temible de principio a fin. Los Medias Rojas tuvieron ocho bateadores con diez o más jonrones y cuatro con quince o más. Nueve remolcaron cincuenta o más carreras. Por esa razón, ningún club de las mayores anotó más que Boston en 2013. Los Medias Rojas encabezaron a las Grandes Ligas en OPS colectivo (795). Su pitcheo abridor luce más compacto, con cuatro abridores competentes (Lester, Buchholz, Lackey, Peavy) y un bullpen de lujo del cual Miguel Cabrera y los Tigres de Detroit pueden dar cuenta.
*
¿Cuál puede ser el punto clave en esta final?
Para Boston, neutralizar a Carlos Beltrán, quien cargó casi en solitario con la ofensiva de San Luis durante la Serie de Campeonato. Para San Luis, que Allen Craig pueda efectivamente recuperarse de la lesión que sufrió durante la fase regular y, sobre todo, que su swing se ponga al día luego de casi dos meses de inactividad.
*
¿Cuáles son las fortalezas y las vulnerabilidades de cada equipo?
Las fortalezas de Boston, un line-up donde cualquiera saca la bola y un relevo filoso que complementa a una respetable rotación. Su debilidad pudiera ser no contar con un Súper As de rotación, como sí tiene San Luis a Adam Wainwright, ese tipo a quien, con los ojos cerrados, le das el séptimo de la Serie Mundial porque tienes la casi absoluta certeza de que te dará el chance de ganar. Pero ya vimos lo que hizo San Luis con Clayton Kershaw. De paso, tener que colocar a David Ortiz en primera mientras se juegue en Busch Stadium no deja de ser inquietante para los fans y sobre todo para los infielders que lo tendrán como blanco.
En San Luis, la fortaleza principal se asienta en Puerto Rico, con dos peloteros excepcionales como Yadier Molina y Carlos Beltrán, quienes lo hacen todo bien en el terreno. También en sus dos primeros abridores, Wainwright y Michael Wacha. Las debilidades bien pudieran ser la falta de una ofensiva lo suficientemente diversificada como para conseguir vías alternas, en caso de que Beltrán y Molina sean obstruidos, y un relevo que no ofrece plenas garantías.
*
¿Quiénes están llamados a liderar la épica de cada equipo?
En Boston, el alma del equipo: David Ortiz. A sus 37 años, cuando muchos avizoraban su desplome definitivo, el dominicano tuvo una temporada brillante y Detroit no se fue liso, pese a que bateó menos de .100. Él, quien formó parte de la generación que en 2004 le devolvió la alegría a Boston luego de 86 años de frustraciones y desesperanza aprendida por no ganar ni una Serie Mundial. En San Luis, la gran historia es Beltrán, un jugador con perfil de potencial Salón de la Fama, pero que jamás, en 15 años como grandeliga, ha podido intervenir en un clásico otoñal. Sus credenciales en postemporada son impresionantes y tal vez sea este anillo lo que le falte para fortalecer su candidatura a una placa en Cooperstown.
*
¿Cómo será la participación de los jugadores venezolanos que han tenido la oportunidad de llegar a esta fase del campeonato?
El peso de los venezolanos en esta serie será ligero. Primero, porque son tres relevistas intermedios, un oficio que se asemeja al de los productores de radio y TV: importante, difícil, sacrificado y a la vez poco reconocido, anónimo y mal pagado. Franklin Morales y Félix Doubront vendrán de la mitad del juego en adelante, sobre todo cuando haya un zurdo en el horizonte. En cuanto a Edward Mujica, de ser el cerrador de San Luis casi todo el año (fue al Juego de Estrellas y todo) pasó a transitar casi desapercibido por los playoffs de la Liga Nacional.
***
LEA TAMBIÉN: Así ve Efraín Ruiz Pantin la Final de las Grandes Ligas. ¿Usted qué opina?
LEA TAMBIÉN: Así ve Mari Montes la Final de las Grandes Ligas. ¿Usted qué opina?