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¿Los venezolanos que votan en el exterior pueden decidir unas elecciones?; por Eugenio G. Martínez

Por Eugenio G. Martínez | 17 de noviembre, 2014

Los venezolanos que votan en el exterior pueden decidir unas elecciones; por Eugenio G. Martínez 640

1. ¿Qué pasó el 31 de julio del año 2009? A finales de julio de 2009, la Asamblea Nacional de Venezuela sirvió para, casi cuatro años después, condicionar el resultado de una elección presidencial sobrevenida, celebrada en el mes de abril del año 2013. Esa fecha corresponde al momento en que, aprobada la Ley Orgánica de Procesos Electorales[1] (LOPRE), que entre otras disposiciones establece en su Artículo 124 lo siguiente: “sólo podrán sufragar en el exterior los electores que posean residencia o cualquier otro régimen que denote legalidad de permanencia fuera de Venezuela”.

En otras palabras, la Ley aprobada exclusivamente con votos de las bancadas del PSUV y del Partido Comunista de Venezuela impuso a los emigrantes venezolanos –temporales o permanentes– el deber de demostrar residencia legal en otro país para tramitar la inscripción en el Registro Electoral o solicitar el cambio de centro de votación para alguno de los 125 consulados de Venezuela.

¿Cuántos venezolanos residen fuera de nuestras fronteras y no pueden votar en los comicios presidenciales? Esta interrogante no tiene una respuesta sencilla, especialmente porque la data oficial sobre este tema, que debería ser divulgada por la Comisión de Registro Civil y Electoral del CNE (pero especialmente por el Ministerio de Relaciones Exteriores) suele manejarse como un secreto de Estado.

Según asociaciones civiles independientes que se encargan de promocionar el voto en el exterior. en 2012 había 948.500 venezolanos fuera del país. De todos esos, 569.100 eran mayores de edad y podrían haber ejercido el derecho al voto en los comicios presidenciales de ese año. No obstante, según los datos oficiales del CNE para esa elección sólo estaban registrados en el exterior 100.495 votantes de los cuales terminaron sufragando 70.951.

2. ¿Influirían en resultados ajustado? El comportamiento electoral de los venezolanos en el exterior no responde a la polarización que se observa en el país. Por ejemplo: en los comicios del año 2012 se contabilizaron 61.224 (90,54%) votos para Henrique Capriles Radonski y 5.716 (8,45%) para Hugo Chávez Frías.

Sin embargo, la diferencia con la que Chávez fue reelecto (1.599.828) hace inviable suponer que el destino de la elección hubiese sido distinto si todos los electores potenciales que se presume están fuera del país hubiesen votado.

En el caso de la elección presidencial sobrevenida de 2013, sin embargo, el escenario de análisis es distinto. En el ámbito internacional, la participación e intención de voto no varió significativamente. En ese momento votaron 62.311 (62%) electores y de esos 56.090 (92%) lo hicieron por Capriles Radonski (56.090).

Históricamente, el voto en el exterior ha tenido sólo un valor simbólico, porque el total de electores inscritos tiene poco impacto en los resultados definitivos. Esta situación se une al procedimiento del CNE de publicar atemporalmente los resultados en las misiones consulares o, simplemente, no hacerlo como ocurrió en el Referendo Constitucional de 2007, el Referendo por la Reelección en 2009 o la elección al Parlamento Latinoamericano en 2010.

Sin embargo, la elección presidencial del año 2013 fue diferente. Los datos oficiales del CNE indican que la diferencia entre Nicolás Maduro y Henrique Capriles Radonski fue de 223.599 sufragios, menos de la mitad de los electores potenciales que se suponen están en el extranjero. En este caso, suponiendo que los electores potenciales se comportarían de una forma similar a los inscritos formales, es válido suponer que el margen de victoria pudo haber sido mucho más ajustado o, incluso, hubiese sido posible otro resultado.

3. ¿Por qué dejan de votar los venezolanos en el exterior? A la fecha, ha resultado imposible precisar el estatus legal de la mayoría de los venezolanos en el exterior. Y resulta aún más complejo indagar si su ausencia en los listados de votación en consulados y embajadas es producto de los efectos de la LOPRE y la exigencia de demostrar residencia legal fuera de Venezuela o si es simple apatía para asumir el (vale decirlo) engorroso proceso para solicitar el cambio de centro de votación al exterior.

Lo que resulta evidente es que los datos oficiales sobre movimientos en el Registro Electoral en el exterior no se corresponden con el día a día de los venezolanos. Por ejemplo: los cambios asociados con los electores en el exterior entre el mes de julio del año 2012 y el mes de diciembre de 2013 han sido escasos. Durante ese periodo, sólo 1.266 electores modificaron su centro de votación de Venezuela a alguna de las misiones consulares o embajadas. Esta cifra contrasta, por ejemplo, con los reportes del Servicio de Inmigración y Ciudadanía de EE.UU. que indican que aproximadamente nueve mil venezolanos obtuvieron visa de residente permanente en el año 2012.

Otro dato que sirve de contraste es el último censo poblacional de EE.UU. Según la información oficial, cerca de 215 mil venezolanos residen de forma legal en ese país. Sin embargo, en los siete consulados que tiene Venezuela en territorio estadounidense sólo están inscritos para sufragar 20% de los electores potenciales, la mayoría residenciados en Miami, inscritos pero imposibilitados de sufragar después del cierre del consulado en el estado de la Florida y su traslado a Nueva Orleans.

Sobre el dato de venezolanos en EE.UU. siempre cabe preguntarse si al censo del año 2010 todos los ciudadanos venezolanos respondieron que se encuentran en el territorio de forma ilegal o como población no autorizada.

Aunque algunos dirigentes políticos argumentan que la mayoría de los venezolanos que han abandonado el país están regresando y por eso no se modifica sustancialmente la cantidad de votantes en el extranjero, no existe evidencia una que respalde tal afirmación. Incluso, según los reportes del CNE entre 2012 y 2013 sólo 913 personas modificaron su centro de votación del exterior a alguno de los colegios electorales en el país.

Como dato comparativo, vale la pena considerar que la cantidad de electores inscritos entre los 85 países en que Venezuela tiene misiones diplomáticas (100.495 votantes) equivale apenas a un tercio de la cantidad de votantes en el extranjero que tiene Bolivia, después de que construyera un nuevo padrón de votantes en 2009.

4. Los consulados lo dificultan. La pregunta de por qué no votan los venezolanos en el exterior puede encontrar respuesta en el trabajo de los consulados y embajadas.

Como se explicó anteriormente, Venezuela posee consulados en 85 países (son 125 delegaciones en total). Al sistematizar los reportes de los venezolanos en el exterior se descubre que menos del 10% de las misiones consulares realizan, entre sus operaciones diarias, la inscripción en el Registro Electoral para nuevos votantes o el cambio de residencia.

En la elección presidencial del año 2012, apenas 44 consulados (el 35%) informaban en sus páginas web y en sus oficinas sobre los requisitos para inscribirse o tramitar cambios de centros, aclarando que el único documento válido para realizar el trámite del Registro Electoral era la cédula de identidad laminada, aunque estuviera vencida. Cabe acotar que se usó el mismo padrón de votación para la elección presidencial sobrevenida de 2013.

Aunque el Artículo 64 de la Constitución, y los Artículos 29 y 41 de la LOPRE, sólo establecen como requisito para inscribirse en Venezuela la presentación de la cédula laminada (vigente o no), las peticiones de algunas representaciones diplomáticas sobrepasaban estas disposiciones legales.

A pesar de los exhortos y comunicados públicos de la Vicepresidenta del Consejo Nacional Electoral, Sandra Oblitas, la mayoría de las representaciones diplomáticas de Venezuela optaron por exigir requisitos adicionales, incluso la exigencia de presentar la cédula de identidad laminada vigente (recordemos que el servicio de cedulación no se presta en estos consulados). Incluso: en 33 consulados se llegó a exigir el pasaporte vigente y la partida de nacimiento original para realizar trámites asociados con el Registro Electoral. Por otra parte, en 14 de los consulados de Venezuela se exigía la presentación de la visa del país donde se encontraba el ciudadano, junto a diversos trámites administrativos previos para poder optar a solicitar el cambio de residencia o la inscripción de nuevos votantes en el padrón electoral.

Según los datos plasmados en el libro La triste alegría de emigrar[2], entre el año 2000 y 2010 la cantidad de venezolanos en EE.UU. creció 135%: 91.507 venezolanos respondieron al censo 2000 y la cifra llegó a 215 mil habitantes venezolanos en el año 2010. Precisa Subero que en el caso de EE.UU. “la gran mayoría de los venezolanos que intenta aventurarse a emigrar entra con visa de turista o negocios de no inmigrante”. En 2010 ingresaron 527.907 ciudadanos venezolanos con visa de no inmigrante, según documento de su I-94 (que incluye turismo, negocios y permiso de trabajo).

5. Se agrava el problema en el futuro. Según Datanálisis, 1 de cada 10 venezolanos asegura estar buscando información o realizando trámites que le permitan emigrar. Es la cifra más alta en la última década.

Los registros históricos de la firma encuestadora indican que en los momentos críticos de emigración de los últimos 14 años (que fueron 2002 y 2004), apenas un 4% de los ciudadanos admitía estar realizando algún tipo de trámite para abandonar el país. No obstante, es preciso aclarar que esto no significa que 1 de cada 10 venezolanos termine emigrando en el corto o mediano plazo, porque existe una merma significativa entre quienes dicen hacer trámites para abandonar el país (lo que incluye buscar información) y quienes finalmente logran concretarlo.

Sin embargo, en este momento el 27% de los venezolanos asegura tener un familiar que decidió emigrar y está residenciado en otro país. Mientras que hace una década, según los registros históricos de Datanálisis, apenas 10% de los ciudadanos admitía tener algún familiar residenciado de forma permanente fuera del país.

Sobre el perfil del emigrante venezolano, el presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, precisa que aunque en la región los estratos más pobres de la población suelen ser los que se aventuran a probar fortuna en otros países, en el caso de Venezuela la mayoría de quienes aseguran hacer trámites para vivir en otros países pertenecen a los estratos más altos de la población (AB / C).

El perfil del emigrante construido por Datanálisis indica que, en su mayoría, el venezolano que abandona el país son jóvenes (entre los 18-35 años), profesionales o tenedores de capital que representan la mayor contribución al PIB del Estado.

La elección presidencial del año 2013 demostró la importancia del voto en el exterior y dio argumentos a quienes exigen que el primer semestre del año 2015 se utilice para concretar los cambios legales que necesita la legislación venezolana para que los resultados electorales sean un reflejo mucho más fiel del pensamiento político de los venezolanos.

*

[1] Con la aprobación de la Ley Orgánica de Procesos Electorales se instauró un sistema de sobre representación de mayorías. Puede ampliarse este punto haciendo click acá. Además, quedaron derogados el Estatuto Electoral del Poder Público, sancionado por la Asamblea Nacional Constituyente el 30 de enero de 2000 y publicado en Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela Nº 36.884 de fecha 03 de febrero de 2000 y la Ley Orgánica del Sufragio y Participación Política, publicada en Gaceta Oficial de la República de Venezuela Extraordinaria Nº 5.233 de fecha 28 de mayo de 1998.
[2] La Alegría Triste de Emigrar. Autor Carlos Subero. Editoriales Varias. Año de Publicación: 2012.

Eugenio G. Martínez 

Comentarios (1)

María
19 de noviembre, 2014

Excelente artículo aunque se enfoque la situación de los venezolanos mayormente en USA y no en el resto del mundo.Yo particularmente tuve que registrarme CUATRO veces desde el 2002 hasta el 2011 en el CNE para poder por fin votar en el Consulado General en Frankfurt, Alemania.Me pidieron siempre una cantidad de requisitos, entre ellos la visa de residencia en el país. Los tres primeros intentos de registros fallaron…nunca supe por qué no aparecía en la lista. El 28.02.11 me registré en el Consulado y luego de numerosas lamadas al Consulado tuve notificación de que mi inscripción fue enviada a Caracas en febrero del 2012!!!!! un año después. El viaje a Frankfurt para las dos siguientes elecciones exigió 800 kms ida y vuelta cada vez pero eso es nada comparado con el sacrificio de los compatriotas en Florida. Hace falta además coordinación entre los venezolanos en el exterior y hay que agradecer la labor incansable de muchas Organizaciones Civiles que coordinan hasta el alquiler del bus para los viajes.

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