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“Sin prensa libre no hay auténticos ciudadanos”, Marcelino Bisbal responde sobre la crisis del papel

Por Prodavinci | 31 de enero, 2014
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Fotografía de Ricardo Marapacuto para el diario El Impulso

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Actualmente, los medios de comunicación impresos en Venezuela, especialmente los privados, experimentan una crisis de abastecimiento de papel, motivada principalmente por retrasos en la aprobación de divisas por parte de la Comisión de Administración de Divisas (CADIVI). En este contexto, hemos consultado a profesionales como el docente, investigador y especialista en comunicación Marcelino Bisbal a propósito de la situación que ha puesto en jaque la circulación de varios medios regionales y nacionales.

1. Si tuviera que explicar en una sola idea qué significa que los periódicos de un país se queden sin papel, ¿cuál sería?

Los medios de comunicación libres son garantía de una sociedad libre y democrática. La libertad de expresión es connatural a un sistema democrático. La libertad de expresión, la libertad de información, la libertad de comunicación y el Derecho a la Información/Comunicación es un derecho humano total y abarcante. Si no podemos gozar y hacer uso de ese derecho no podemos reclamar la ausencia o el deterioro de los demás derechos. Por eso se dice que el Derecho a la Libertad de Expresión es un derecho que abarca y comprende a los demás derechos. De ahí que la sociedad debe tener clara esta idea y luchar por ese derecho, porque sino no sabemos hacia dónde vamos. O sí lo sabemos: hacia una sociedad autoritaria, no democrática y de seguro que totalitaria.

¿A qué viene este breve preámbulo? Es evidente que el Gobierno no tiene dólares o los tiene para usarlos en otros fines. Allí está la deuda con las aerolíneas que llega ya a la suma de 3,8 millardos de dólares, o la deuda con el sector de los alimentos que llega a 2.43  millardos de dólares y paremos de contar. La deuda con los diarios impresos para la compra del papel apenas llega a 123 millones de dólares para todo el año. ¿Cómo explicar que desde mayo de 2013 no hay liquidaciones de dólares para los distribuidores de papel?

Insistimos, sin medios no es posible el debate en la sociedad y sin ello no hay libertad de expresión. Ya lo decía alguien por estos días: “Sin acceso libre al papel, no hay prensa libre. Y sin prensa libre, no hay auténticos ciudadanos”.

2. ¿Cómo puede afectar la vida cotidiana de cualquier ciudadano esta situación? ¿Va más allá de complicar una manera de informarse que sólo comparten quienes leen el periódico diariamente?

Ya lo dijimos antes, una sociedad sin medios, una sociedad sin periódicos por la falta de papel que le niega el Gobierno, se va pareciendo a una sociedad nada democrática.

Pudiéramos entonces plantear la desaparición total del medio en soporte impreso. Sin embargo, en un país como el nuestro, donde los índices de penetración de Internet, si bien es cierto han subido, todavía no alcanzan los estándares para convertir al medio digital en un negocio ni publicitario ni para la circulación-consumo de información y comunicación. Hay que ir pensando en esa reconversión, pero todavía nos falta. Es más, los grandes diarios, tanto de circulación nacional como los más importantes regionales, se están moviendo y experimentando en los dos soportes. Pero no se trata de plantear el dilema si medios impresos o diarios digitales por una razón política. De ahí que seguimos insistiendo en lo que dijimos antes. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organismos supranacionales como la UNESCO, Organizaciones No Gubernamentales dedicadas al estudio del tema, ONG nacionales especializadas en Derechos Humanos y en particular sobre el Derecho a la Libertad de Comunicación e Información lo han dicho claramente: “La existencia de garantías para la libertad de expresión y el Derecho a la Información/Comunicación constituyen los pilares fundamentales para el libre debate de ideas y para la participación ciudadana. En la medida en que se cercenen los derechos a la comunicación y a la información, en esa misma medida disminuyen las condiciones para la plena existencia de la democracia”.

De darse el cierre total de los medios impresos por la falta de papel y de otros insumos se generará desempleo de toda la cadena de producción que representa hacer, imprimir y distribuir un periódico. Esto es sumamente grave, pero es también muy grave lo que significa para la Libertad y el Derecho a la Información/Comunicación de la sociedad. Pareciera que nos estamos acercando a 1984 de George Orwell. ¿Que exagero? Espero que sí.

3. Políticamente, ¿qué significa que el Gobierno no honre la deuda en dólares con los periódicos?

Los medios de comunicación ponen en evidencia, visibilizan, transparentan  ─unos mejor que otros la incapacidad del Gobierno a la hora de diseñar políticas públicas en relación con la vida del país. Los medios más críticos (que  cada vez son menos, pues muchos se autocensuran por miedo a la jurisprudencia dirigida hacia ellos) ponen en evidencia la mala gestión gubernamental, su incapacidad e ineficiencia y además ponen sobre el tapete de la opinión pública hacia dónde se orienta este proceso político. En vida, el presidente Hugo Chávez lo dijo en octubre de 2001: “Los medios (léase medios privados/comerciales) son enemigos de la revolución”. Esta idea la tienen muy clara los herederos de aquel Gobierno. Por eso le tienen tanto miedo a los medios y a sus profesionales cuando estos son críticos frente a la gestión gubernamental.

En ese sentido, los medios impresos hasta ahora son los únicos que se han podido librar de alguna manera de mecanismos de regulación.  Los medios más afectados han sido los radioeléctricos (radio y TV). De ahí que una manera de acallar a los diarios, por su sentido crítico, es retrasando o negando los dólares requeridos para su publicación. Por eso el tema del papel para los diarios es muy grave, pues implica una manera de cercenar la libertad de información que ellos representan y que la sociedad requiere.

Una sociedad sin prensa es una sociedad que se acerca a una sociedad nada democrática y autoritaria. De ahí que el tema de la falta de papel para los diarios es sumamente grave y muy peligroso para el país. Quizás esta sea la manera que el Gobierno se ha inventado para cercarlos y hacer que ellos tengan que desaparecer bajo el soporte papel.

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